Espere, mi señora majestad, que le pongo los números romanos y nos enteramos todos de que es usted una reina. O futura, que todo llegará, aquí ya vamos por Felipe VI.
Enriqueta XVIII, así está mejor.
No sé, más bien se parece usted a mi tía Enriqueta. Pero de eso se trata ¿no?, de sentir la cercanía de su señora Majestad. Complicidad no, esa hay que ganarla a pulso.
Creo que soy monárquica, al menos eso es lo que he vivido desde niña y, hoy por hoy no hay otra opción con bases y sólida para elegir. Tiré de demasiados hilos para poder escribir mi segunda novela, Las palabras del viento, y la idea de ser republicana no me convence. La utopía tampoco. Los extremismos y el fanatismo no son buenos para nadie. Cierto que a la II República se le fue la pinza, pero una III me asusta. Ya soy lo suficiente soñadora; necesito realidades sin corrupción. Y este gobierno no ayuda, no ayuda.
Cuando yo nací (que no vuelvo a decir en que año porque en unos meses me caen los 50 y no sé si caer en una depresión o no, si ir al psicólogo o no, o ingresar directamente en un psiquiátrico. O no, y me hago una liposucción) decía que cuando yo nací había un señor que inauguraba pantanos. No le recuerdo apenas, aunque las cicatrices que abrió siguen vigentes. Después vino un Rey, una Democracia y una Constitución. Y me hice mayor, y según fui creciendo iba dejando de creer en la política, tía Enriqueta… digo señora Majestad.
Creo en el ser humano, en quien es consecuente con sus actos, y en la vida.
Mi señora Majestad Enriqueta XVIII ¿por qué no corta la cabeza a todos estos ministros que nos quieren sacar de la crisis a ‘navajazo’ limpio con los que menos tienen? Por lo menos al otro solo le vi inaugurar pantanos.
2 comentarios:
Siempre La Grande, la Fuera de Serie, la María Narro que un día conocí, llena de garra, de pasión, de talento, de sentimientos, ternura y justicia.
La misma María Narro que no se detiene jamás. Valiente y hermosa. (Y también una excelente poeta...)
tepe quieperopo
me conociste y me conoces, Miguel. Un bastante menos de lo que has dicho, pero peso igual y mido lo mismo.
La misma ;)
yo tb te quiero.
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