En este libro de pequeños relatos
vamos a soñar y reírnos recordando aquel amor imposible que nos partió el
corazón, aquellas vacaciones tan bien preparadas, o aquel hombre al que nunca
olvidaremos; vamos a apatrullar la ciudad, las ovejas, el mus, ¿el oeste?, ese
hijo que nunca se está quieto; tantas y tantas cosas, y alguna carcajada.
Porque...
¿La culpa siempre la tienen ellas? Quizás… (…)”
Esto
es un pequeño aperitivo, voy a estar unos días missing. Pero lo estoy pasando
genial, aunque con anemia y volcada en mi tratamiento. A no ser que se me case
otra hermana