-Mírame... te acuerdas que hace tiempo, en otro momento y por el mismo motivo, escribí un cuento. En él dejabas tu silla y montabas en un caballo blanco de largas y cuidadas crines, sintiendo como el viento te acariciaba mientras atravesabais una inmensa ladera llena de flores.
Al llegar al final de la ladera se abrió un camino que ascendía hasta el cielo. Sin dudarlo apretaste las rodillas contra el lomo del hermoso caballo para indicarle que comenzara a subir.
Según ascendíais veías que a un lado del camino estaba todo lo que duele. Desprecios, ignorancia, falta de respeto, prejuicios... Pero en el otro lado del camino sólo había bondad y diálogo.
Al llegar casi al cielo y después de haber sufrido gratuitamente (gratuitamente porque ellos ni sospechan que tengas sentimientos, ni sospechan que cada vez que le dicen a alguien “bah, está igual” te mereces todo porque ese igual en una enfermedad degenerativa es mucho, y cuesta más)... ya no sé por donde iba... ¡ah, sí!
Al llegar casi al cielo y después de haber sufrido gratuitamente iniciasteis el camino de regreso, pero ésta vez sólo mirabas el lado bueno del camino, el lado bueno de las cosas. Volvisteis a atravesar la ladera, sonriendo mientras galopabais, y reparaste en que sólo había dos clases de flores. Había muchas rosas blancas y había muchas rosas rojas.
Cuando te sentaste de nuevo en la silla, descubriste entre tus manos una rosa de cada color.
Mírame... vuelve a retar al mundo con los ojos, una rosa blanca simboliza la vida, la roja la pasión... y tu sientes Pasión por la Vida.
10 comentarios:
Lo de la "avería emocional" debe ser contagioso María.Me voy directo a la taberna a ver si encuentro a algún mecánico del Corazón.Si quieres te espero en la mesa del rincón y voy pidiendo unos chupitos del "licor prohibido".Pasión por la vida...gracias María. Salud¡¡¡¡.
¡Esta es mi María..! Pasión por la vida, sí señora... Que no se diga. ¿Te fijaste cuando ibas sobre el caballo que el lado bueno del camino era mucho más amplio que el malo?
Un besote, guapa, y siempre p´alante.
Un hombre llevaba dos cántaros de agua. Uno entero y el otro tenía un pequeño desperfecto. El cántaro entero se reía del otro porque se le escapaba el agua por el camino. Pasó el tiempo y por el lado del cántaro nuevo, había sequedad en el camino y en el otro lado, habían crecido multitud de flores que habían nacido gracias al agua que perdía aquel cántaro con el minúsculo desperfecto.
Por tu lado del camino siempre habrán flores María, porque con tu cariño y tu ternura las haces crecer. No tomes en cuenta al cántaro nuevo, jamás podrá hacer crecer las flores por el camino.
Un beso muy grande, cariño.
No me gustan los sabiondos, los listos, los seres perfectos, los bienplanchados, los poseedores de la verdad absoluta, los intransigentes, los meapilas..., muy al contrario, prefiero a las personas que son capaces de darse como son, sin más.
María, a los perfectos, a los ciegos que no desean ver -que son los verdaderos ciegos-, pues como se dice en plan castizo: ¡Que les den!
ABRAZOS
María, si alguien cercano a ti no sabe valorar tu esfuerzo, tu valentía, tu gran corazón y ese don tan maravilloso que tienes para transmitir con las palabras, es que tiene una gran ceguera en el alma.
En verdad ese alguien es digno de lástima porque tiene un problema muy grave y difícil de solucionar. Piensa en ello cuando te hagan daño sus palabras y no les des ninguna importancia porque nacen de la ignorancia, esa persona no te conoce en realidad.
Un beso y un fuerte, fuerte abrazo.
que lindo mariiiaaa!!!! me dejo pensando.. como siempre!...
te invito a mi blog, hay un premio para vos!
besos gigantes!
sabri
Caballero Quimera, va la del rincón está bien. Pero chupitos no -algún día aprendo a bebermelos rapidamente, soy un show me entra la risa porque huelen fatal ;)- mejor vaso de tubo largo.
Sí, es contagiosa la averia emocional, pero hay excelentes mecánicos. Los mejores los encontramos al miarnos en el espejo.
Un beso grande.
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Avalon, lo intento, esa es mi vida.
Un besazo.
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Malena, ya lo sé, pero te cansas de ser siempre el cántaro roto, despreciado, el más fuerte y el único que no vive en la superficie.
Besos.
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Paco, que les por mi encantada, lo malo es que los 'efectos colaterales' se pagan dentro de mi casa, los pago yo.
Besos.
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Durrell, ahí le has dado. Ese es el problema, vosotros no me conoceís te dirán si te leen.
Ellos me ven cada dos o tres meses, me saludan medio segundo y me vuelven a ver cada dos o tres meses. Y tú diles que no me conocen verás donde te mandan.
Besos.
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Sabri, GRACIAS
Amiga,Mucha fuerza, mucha pasión, es lo que veo en tus letras y logras trasmitirlas, un beso
...Yo sé que siempre vuelve. Es más no creo necesario ese vuelve porque está.
(Esa hadita en la rosa...) ;)
Besitos
Muchas gracias, Conny.
Un beso.
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Miguel, si no estuviera siempre -llámala hadita, llámala X- no me hubieras conocido.
Besos :)
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