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Como dos niños en el umbral de la felicidad
sin atrevernos
a entrar,
sin podernos separar,
buscando el juguete de la ilusión,
esquivando las ganas de llorar.
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Como dos niños ante un mundo por descubrir,
una pasión por compartir
un sueño por vivir,
como dos niños ante el arroyo de la verdad
hoy...
hoy te quiero mucho más.
5 comentarios:
Impresionado y realmente gustoso de leerte.
Recibe un abrazo en tu alma.
Es una preciosidad lo que has escrito. Está lleno de emoción y ternura.
Un beso.
Gracias, Malena, cielo.
Besos a los dos.
De alguna manera el amor es eso, curiosear en el otro con los ojos abiertos a todo y con su capacidad de asombro ante cada descubrimiento, investigar juntos la vida, descubrir unidos el mundo...
Qué bonito poema, María..
pero es muy triste perde esa capacidad de asombro... quien la haya perdido, digo ;)
Un beso.
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